Llega un momento en la vida de todo trabajador asalariado en el que, por cuestiones de ambición o pérdida de empleo, viene al caso plantearse la opción de iniciar la aventura laboral por cuenta propia.
La primera pregunta que asalta al nuevo emprendedor es "¿qué puedo ofrecer al mercado?", y una vez resuelta, la segunda cuestión del nuevo freelance es "¿cuánto vale mi hora de trabajo?". Pero para llegar a ello la primera pregunta que hay que hacerse es: "¿cuánto me cuesta a mi la hora de trabajo?".
Teniendo claro que nuestro precio depende en gran parte del coste que soportamos (porque trabajar para quedarse igual o perder dinero es tontería), lo primero que tenemos que hacer es un listado de los gastos mensuales a los que como emprendedores tenemos que hacer frente. Estos son algunos de ellos:
Cuota de autónomo (A)
Sin duda este es el mayor escollo económico existente en España a la hora de hacerte autónomo. Al principio todo es maravilloso con la cuota de 50€ al mes pero según pasa el tiempo te das cuenta de que lo que antes era un billete anaranjado al mes que cobraban en tu cuenta, con el tiempo son seis. Y eso mensualmente quiere decir que los primeros 300€ que factures van para pagar a la Seguridad Social.
Alquileres (B)
Para tu labor debes tener un espacio de trabajo en el que te sientas cómodo y tengas todo lo necesario para rendir. Esto puede ser una oficina, una habitación de tu casa en la que tienes el taller o despacho, un hotel para ir a ver a un cliente de otra ciudad, un garaje para el coche, etc.
Telecomunicaciones (C)
En la era de la comunicación hay que estar conectado y sin una conexión a internet y una línea de teléfono fija o línea móvil que te permitan agilizar procesos no hay nada que hacer. Pero claro, tiene su coste cada mes.
Medios de transporte (D)
Y hay que desplazarse y para eso hace falta un coche, una moto, una bicicleta, un autobús, etc. Desde un coche propio que vas amortizando usándolo para generar ingresos, hasta el autobús urbano que coges cuando el aparcamiento está difícil. Y por supuesto el avión o tren que de vez en cuando hay que coger para ir a otra ciudad. ¡Ah! Que se me olvidaba, el combustible y el mantenimiento del vehículo propio (cambio de aceite, ITV, neumáticos, etc), que todo suma. Hay que tener en cuenta que algunos de estos conceptos se deben prorratear a lo largo de su tiempo de uso, por lo que es importante estimar cuánto tiempo los vamos a utilizar e identificar el coste que correspondería mensualmente. Por ejemplo, un coche de 12.000€ que pretendemos usar durante 10 años, nos dará un coste mensual de 100€.
Dispositivos (E)
El ordenador personal es indispensable en el 99% de los casos en los que los trabajadores se establecen por su cuenta, ya sea para llevar la contabilidad, hacer facturas, documentos, etc. Además, en el día a día se suelen utilizar otros dispositivos como pendrives, tablets, discos duros externos para tener copia de todo, etc. Al igual que con los medios de transporte, son bienes amortizables por lo que su coste se repartirá en el tiempo.
Dietas (F)
Hay veces que el trabajo requiere comer o cenar fuera de casa, así como invitar a los clientes o proveedores. Está claro que aunque comas en casa hay un coste pero si se hace fuera ese coste aumenta. Pero no siempre es así, a veces conviene comer fuera para no perder tiempo y dinero en el transporte hasta casa.
Otros gastos (G)
Por ejemplo si necesitas suscribirte a una revista del sector en el que vas a trabajar, tener reservas de material de papelería para tomar notas, comprar todos los días un material concreto, etc. También aquí podrían incluirse cursos de formación para optimizar el trabajo o ampliar los servicios prestados. Estar actualizado es importante para ser competitivo.
Cómo obtenemos el coste por hora
Muy sencillo, sumamos "A+B+C+D+E+F+G= CTM" y tenemos el Coste Total Mensual. Si tenemos en cuenta que algo estándar es que se dediquen al trabajo 8 horas diarias durante 5 días a la semana, nos salen 160 horas al mes.
Por tanto, si dividimos "CTM/160 horas", obtendremos el coste por hora de nuestro trabajo (sin tener en cuenta ni el IVA ni el IRPF).
A mi, en mi circunstancia me ha salido un coste de 5,30€/hora, por lo que el precio de venta de mi hora de trabajo deberá situarse obligatoriamente por encima.
Otras vías
Como todo está inventado, a veces en vez de hacer cálculos en papel (como ha sido mi caso para este artículo), es más sencillo poner en Google "cómo calcular el coste por hora de mi trabajo" y saldrán páginas en las que tan sólo habrá que ir rellenando huecos y darle al botón "calcular". Es cuestión de gustos pero recomiendo hacerlo a mano al menos una vez para ser consciente de todo lo que hay que pagar para poder generar.
¿Tienes algún otro método para calcular el precio de tu hora de trabajo? Si te animas a compartirlo puedes dejar un comentario más abajo.
¡Un saludo!
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